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Step by step (ooh baby!)
jueves, setiembre 30, 2004 |
La primera experiencia comunicativa con Pertur tuvo excesivas consecuencias en mi conducta diaria. No sólo no necesité de pastillas para dormir para pegar el ojo, sino que sentí una extraña alegría en el corazón. ¿Somos "patas"? No lo creo, tan sólo es un atisbo de una amistad por descubrir y por cultivar, y como la malahierba a veces acaba hasta con la planta más bella, tendré que planear muy bien una estrategia para no minar el camino ya recorrido y sobretodo para no (ejem) CAGARLA.
¿Por qué le dije "chaufa"? Porque quise ocultar mi nerviosismo imperante, y también quería demostrarle que era un chico "moderno" y que no era ningún "quedado" y que además tenía "lleca". Menudo razonamiento erróneo, pero es cierto que errar es humano, y volver a errar en lo mismo es de tontos, y como no quiero amilanarme antes de tiempo, decidí esgrimir una serie de "things to do in order to get him":
STEP ONE (we can have lots of fun):
La caminata diaria hacia el paradero después de clases.- No importa que yo tenga que tomar otro camino, no importa que una semana atrás él ya me haya visto yéndome para el otro lado, si quiero iniciar una amistad, necesito al menos volver de nuestra caminata una rutina, cosa que a la larga, llegue a "extrañarme" si es que no lo acompaño.
STEP TWO (there's so much we can do):
Hablarle de mujeres.- Este el único punto dudoso que no ha sido cabalmente aprobado por mí, pero mi amigo Robus Tito, graduado con máster y doctorado en el tema de "cómo llevarse a un straight a la cama" insiste en decir que lo primero que hay que hacer es hablarle de mujeres y demostrarle que a mí también te gustan, de manera que si llegamos a gustarnos, tendré la excusa (de mentira, por supuesto, pero peor es nada) de decirle "¿sabes qué? soy straight, me gustan las mujeres, y es extraño pero tú me gustas mucho".
STEP THREE (It’s just you and meeeee)
Conocer sus gustos de pe a pa.- Este punto ya es más obvio, y la única finalidad de ello es PRESTARLE COSAS, intercambiar CDs o DVDs o lo que sea. Una estrategia valiosa en nuestro caso es tener que comprarme el cassette de audio del Café Crème (nuestro libro de francés) y decirle "Es muy bueno porque te ayuda a practicar un montón, yo lo usé y me sirvió bastante, ¿quieres que te lo preste?")
STEP FOUR (I can give you more...)
Ir a su casa.- Si los anteriores pasos han funcionado a la perfección, éste sería el último peldaño hacia el paraíso. Por supuesto que para este entonces ya seremos "patazas" y obviamente, luego de unas saliditas ("oe acompáñame al centro"), ya consideraremos que existe suficiente confianza como para ir de vez en cuando a su casa. Lo bueno es que luego de la clase él se regresa a su morada, por lo que pude entender, además de estar cerca ("Rosa Toro..."), y puede ser que en una de esas yo diga "Qué coincidencia, mi tia vive por aquí, te hago la taba", cosa que si pasamos por su casa es de asegurar que me dirá "Esta es mi casa, ¿quieres pasar un rato?". Ello da pie a regresar muchas veces más, y si llevo pan, algún snack, o hasta un six pack, siempre seré bienvenido.
STEP FIVE (Don’t you know the time has arrived!)´
Noche, chelas y rock n' roll.- Si todo anda bien, ya no hay marcha atrás pues esta noche es LA noche. Si es sábado, mucho mejor. Si estamos solos, muchísimo mejor. Como las visitas a su casa han sido esporádicas, habría que quedar un día en la noche para conversar, escuchar música o estudiar para un exámen (¡claro!) pero siempre con alcohol en abundancia. Empiezaré hablando yo y contándole mis experiencias del colegio, siempre con mujeres, alguna profesora bonita o mi primera enamorada (ja!). Luego iré añadiendo carne hasta llegar a relatarle (aumentando la dosis de alcohol) de mi primera vez y lo que me gusta hacer en la cama (con mujeres, claro). Como él es virgen, está alegre, hay confianza, y además está picado, tendrá una erección que yo veré con gran satisfacción. En ese momento deberé aumentar la dosis y si es posible mezclar tragos, cosa que terminemos en el suelo, uno al lado del otro. Y ahí viene la "excusa". Tocarle la entrepierna y decirle que es raro, pero que me provocaría hacerle "cosas". Si puedo agrego un poco de llanto y empiezo con la cantaleta de "no sé por qué, a mí me gustan las mujeres, pero ahora me provoca darte un beso". Puedo empezar con el beso (más romántico) pero si se niega, atacar de frente: bajarle el pantalón y chupársela en un santiamén. Obvio que mi talento oral lo hará eyacular en mi boca, y accederá a seguir haciendo más (a esa edad todos somos insaciables). Al día siguiente quedará la complicidad del trago, pero de vez en cuando hay siempre una excusa para repetir. Todo es cuestión de darle tiempo al tiempo, hasta que se enamore de mí.
¿Funcionará? Tendré que ponerlo en práctica para comprobarlo. No tengo nada qué perder.
*Lo de Step One, Step Two, por si acaso, ignorantes, es de la canción "Step by step", de los New Kids On The Block (para aquellos que no nacieron en los 80).
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