|
|
|
|
Completamente enamorado de él
jueves, octubre 14, 2004 |
Finalmente llegué a la conclusión que por más guapo que sea Sebas, por más sexo que tenga con otros miles de hombres, por más que Pierce Brosnan me pida una mamada de rodillas, NUNCA podré sacarme a Pertur de la cabeza. Estoy tan enganchado a él como lo estoy con las pastillas que tomo a diario. Dejar de tomarlas significaría sufrir más de la cuenta, por eso les estoy eternamente agradecido por amortiguar un poco el dolor que me causa amarlo demasiado. Yo jamás estuve lo suficientemente preparado para lo que iba a suceder hoy...
Toc, toc... LA PUERTA. Son las 9:20 de la mañana. Hacía tan sólo 5 minutos que la profesora había cerrado la puerta con llave. Mi corazón dio un vuelco, no podía creer que el día en que a Pertur le cerrarían la puerta en las narices finalmente había llegado. La profesora abrió. "Bonjour..." dijo él con su voz tierna e infantil. Me puse a temblar. Ese chico ya domina el comportamiento de mi cuerpo. No quise verlo cuando atravesó el salón y se sentó en la carpeta frente a mí, bajo la ventana. Cuando alcé la vista fue un impacto visual tan grande que tuve que aferrarme a la carpeta para no empezar a convulsionar. No sé si cada día que pasa lo veo más atractivo, o si al dejar de verlo un día hace que mi percepción hacia él aumente. Pero el hecho es que Pertur era un prístino ángel de belleza adolescente. Un sweater azul marino con rayas rojas a la altura de los hombros, Tommy Hilfiger (pista nº1), su blue jean desteñido de siempre y oh divina providencia! un par de zapatillas de gamusa negras con rayas grises, muy bonitas. ¿Serán nuevas? Excelente elección, ni yo podría haber comprado unas zapatillas tan regias. Me miró de reojo y empezó a jugar con su pelo (pista nº2), el cual, al estar bajo los rayos de sol, brillaba tanto que destellaba mechones rubios. Parecía haber salido de la ducha, estaba un poco mojado y revuelto, su piel estaba inmaculada, pero con un apacible tono de rosado, sobretodo en sus mejillas y sus labios rojísimos, entreabiertos y húmedos (pista nº3).
Perdí el control de mí mismo. Me había equivocado. Pertur no era el chico con cara de bobo y sonrisa de Pokemon. NO. Era un cuasi adolescente digno de salir en una revista de modas. Sé que estoy exagerando, pero yo sería más que feliz si lo tuviese a mi lado. La profesora, que estaba cerca a mí, nos ordenó abrir el cuaderno de ejercicios, pero yo estaba tan obnubilado que hice caso omiso a sus instrucciones. No pude volver a mirar a Pertur. Sé que él me miraba, pero en ese momento estaba tratando de asimilar lo bello que había amanecido él. Sentí un gran vacío en el estómago, mi corazón latía tanto que se me iba a salir por la boca, mis piernas efectuaban un extraño y compulsivo vaivén. Estaba a punto de estallar. Y lo peor de todo es que no podía relajarme. Con la profesora tan cerca, no podía flagelarme con el portaminas, o hacerme un tajo en la piel con el filo del libro, para calmarme un poco. Quería hacerme heridas. Quería dejar en mi cuerpo MARCAS de lo que siento por Pertur, para enseñárselas, orgulloso, si es que algún día llegamos a estar juntos.
Yo había notado que la profesora hablaba al resto de la clase, pero aún me hallaba inmiscuído en una ola de epilepsia. En el libro, empecé a escribir "te amo, te amo, te amo" en todas las hojas. Tenía que hacer algo, estaba poniéndome pálido. La profesora alzaba la voz. La Chica de La Mala Permanente, sentada junto a mí, me dio un codazo. Fue ahí cuando reparé que todo ese tiempo la profesora me estaba hablando a mí y que además, la clase entera, incluído Pertur, me estaban mirando con impavidez.
Profesora: ¿Cyan?
Cyan: (Aun en shock) ...
Profesora: Abre tu cahièr d'exercises... ¿No me escuchas?
Cyan: Ah, s-sí... perdón.
Profesora: ¿En qué andas pensando? (Riendo) En el fin de semana, seguro...
Cyan: Eh... nommm... Es que.. el exámen del lunes. Me preocupa un poco.
Profesora: Bueno.
Salvado. Pero a medias. El resto sonreía y Pertur me examinaba con su mirada de Hannibal Lecter. Abrí el cahièr. Noté que mis manos temblaban. Una gota de sudor cayó por mi frente.
Profesora: ¿Te sientes mal? ¿Te pasa algo?
Con un amable gesto, le hice saber que estaba equivocada, cuando quería decirle que estaba en lo cierto, que no me pasaba algo, sino MUCHO, que ahí mismo, en ese salón de clases, estaba a punto de darme un ataque al corazón de tanto amor que sentía. Tuve que emplear una táctica de relajación para poder respirar tranquilo y analizar los nuevos descubrimientos que había hecho, como mencioné líneas arriba, a saber:
Pista nº1.- TOMMY HILFIGER. Fui un tonto al no percibirlo desde un principio. Pertur Bado siempre viste sweaters y/o polos de esta extremadamente fashion marca de ropa. ROPA. Gusto de vestir, combinar, de usar. Además, esas zapatillas, realmente vistosas. No de colores chirriantes, pero agradables, sobrias, finas, de buen gusto ¿Por qué se viste tan bien? ¿Será gay?
Pista nº2.- EL PELO. Obsesión ya comentada en un post anterior... Siempre se moldea su bella melena con ambas manos, quizás cada 10 minutos. ¿Será gay?
Pista nº3.- LOS LABIOS. Siempre están entreabiertos, gruesos, suaves y húmedos. Bastante más húmedos y rojos de lo normal. Por su color de piel (blanquísima), los labios tienden a sobresalir, pero... ¿acaso se echará bálsamo labial? ¿Será gay?
Cuando acabó la clase, ya en la calle, nos encontramos solos de nuevo. Al pasar por un camino estrecho, sin decir nada, me cedió a mí el paso. ME DEJÓ PASAR PRIMERO, apartándose. Qué caballero, llegué a pensar, pero ¿por qué lo hizo? Además estábamos solos... tengo que hablarle de algo, de lo que sea, pero ya...
Cyan: ¿Y qué planes para tu cumple? ¿Dónde es el tono? Jajaja (Risa lo más straight posible).
Pertur: Pucha no sé aún... No creo que haga nada, tengo miles de exámenes... no sé cómo voy a hacer... tengo la cabeza a mil.
Cyan: ¿Exámenes en la universidad? (Pregunta tonta)
Pertur: Sí, qué vaina, hasta ahora no sé cómo hago para llegar acá, estoy tan cansado...
Cyan: Pues tienes que llegar, sino, volarás en faltas. La tía ya te tiene tazado...
Pertur: Tía de mierda, jaja... (!)
El consejo de Karla... es hora de ponerlo en prática... ahora o nunca.
Cyan: (Mirando a Pertur) Pucha qué calor hace ¿no? Y encima tengo que irme hasta Ripley... no me quieres acompañ...
Gordo: (Interrupiendo) ¡OE! ¿QUÉ TAL? ¿qué tal la clase?
Segunda vez que alguien se cruza en mi camino durante un momento decisivo. Gordo de mierda. Pero no tuvo la culpa, lo reconozco. La tuve yo por no pensar rápido. Y Pertur por supuesto que ni escuchó lo que le estaba diciendo.
Gordo: ¿Con quién vas a hacer el diálogo?
Pertur: Con El Viejo... puta, eso también me preocupa, ¿y si la caga?
Gordo: Qué bestia eres, no te hubieses juntado con él.
Pertur: Puta, sí...
Bien hecho, pensé, bien hecho, chibolo, eso te pasa por no haberte querido juntar conmigo, pero ¿y si en realidad sí querías hacer el diálogo conmigo? ¿Qué te lo impidió? ¿La Chica De La Mala Permanente?
Llegamos al paradero. Combis, gente, despedidas. Pero me aventé:
Cyan: Chau, Pertur, oe verdad, pásala chévere en tu santo. (Le agarré el brazo, en realidad fue un intento de abrazo frustrado, mejor que no lo hayamos consumado).
Pertur: Gracias.
Ese "gracias" fue en serio, porque me miró directamente a los ojos y se tomó su tiempo para poder pronunciar bien la palabra. Gracias. Gracias a tí, Pertur, por causarme este dolor... Y ya no puedo más. Mi cuerpo te reclama, te necesita, te pide a gritos. Ya no puedo ni respirar. Tú no sabes nada de mí, pero yo al contrario, lo sé todo de tí. Y también, sé que NADIE te va a poder amar como yo, porque yo me DOBLEGARÉ, me negaré a mí mismo, no EXISTIRÉ nunca más, para que existas tú, porque si te entregas a mí, yo te seguiré, te daré la llave de mis sentimientos, de mi cuerpo, seré tu amante, tu objeto, algo TUYO. Y no viviré para nadie más, porque haré lo que tú quieras. A partir de este momento he dejado de existir para pertenecerte, aunque tú no quieras amarme.
Ya no te veré hasta el lunes, porque el lunes iniciaré las medidas de fuerza mayor para poder llegar a tí. Hay que hacer algo, un plan, una estrategia, cualquier cosa. Y es urgente. Y va en serio. Porque el dia de tu santo, que es el sábado, no saldré de mi casa y pensaré todo el día en tí. Estoy enfermo. Mi vida corre peligro.
|
|
|
|
|
|
|
|
. |
|
|